Hola a tod@s!
En este mes vamos a estar hablando del tema tan conocido, por momentos difíciles, lleno de preguntas y pocas respuestas, pero eso si, de mucho aprendizaje, el de ser padre y madre.
Este blog está enfocado a todos los padres y madres primeriz@s, que pasan por incertidumbre, angustia, estrés, falta de sueño, miedo, momentos difíciles que solo los que han pasado por esta situación, lo saben.
Hoy en día existe mucha información del cuidado de un hijo, pero como es bien sabido, cada hijo es diferente y lo que a uno le funciona al otro no, es la parte maravillosa de aprendizaje y crecimiento de ser padre o madre, el ir experimentando y ver qué es lo que funciona para ambos.
Es normal que prepares todo para el nacimiento del bebe, laves la ropa, prepares la habitación, su cuna, etc. Pero prepárate, nunca va a ser perfecto, a lo mejor tu hijo será alérgico al suavitel o jabón con que lavaste su ropita, pero tranquil@, no serás al únic@, ni al últim@ que le pase, de parte de la comunidad de ARANA, les decimos que no traten de ser perfectos, traten de dar o hacer lo mejor que puedan, aprendan de los errores o aciertos y continúen en este camino tan complejo de ser padre o madre (algunos casos ambos).
Aquí les dejamos unos Tips para la mejora de cada día
- Se atent@, observa a tu bebé, para que vayas aprendiendo lo que te quiere decir.
- ¡Cuídate! recuerda que el estado de ánimo del padre o madre (o ambos) influye en el bebé, es por esto que te recomendamos que te atiendas, duermas, etc.
- Pide ayuda, se vale que por momentos reconozcas que no puedes más y acércate a alguien de confianza.
- Se valen los errores, si eres de los que quieren que todo les salga bien, en este camino de la paternidad te vas a dar cuenta que no todo te va a salir bien, lo más importante es que aprendas de lo sucedido y continúes.
- Recarga energía, sabemos que a veces es difícil, pero ocúpate de ti mism@, date tu tiempo, ya sea en dormir, descansar, o hacer lo que más te gusta.
Aquí les dejamos un testimonio de padres primerizos
Me enteré que iba a ser madre y me emocioné mucho, pero a la vez comencé a llenarme de dudas, pareciera que me entregaban una bolsa llena de preguntas, sobre qué se debe hacer y qué no. Mi ilusión era mucho más grande, cuando compartí la noticia con Manuel (mi esposo) él también se emocionó, pero después de unos pocos momentos también apareció su bolsa de dudas. Nos preparamos lo mejor posible, desde las idas al ginecólogo, la ropa, el cuarto todo, creíamos que lo estábamos haciendo perfecto.
Llegó el día esperado, yo quería que mi bebé tuviera la ropita limpia y la lavé con mucho esmero, bueno ahí fue mi primera torpeza, resulta que mi bebé tuvo una reacción alérgica, yo sentía que había fallado desde el primer día. Llegamos a casa y ya había hecho un calendario organizado los tiempos y ese fue mi segundo error, mi hijo traía sus propios horarios, a los pocos días me empecé a sentir bastante cansada, intentaba tener todo listo, Manuel se esmeraba igual que yo. Los dos nos empezábamos a sentir frustrados, queríamos lo mejor para el bebé pero parecía que era todo lo contrario.
Fue ahí que busqué ayuda a las personas que me rodean, ¿Qué suavitel utilizan? ¿Cómo manejan los horarios con sus hijos? y en vez de sentirme segura o al menos de llegar a una respuesta, fue todo lo contrario, me llené de más dudas. Así que mejor decidí tener apoyo extra que me comprendiera, llegué a un grupo de las redes sociales de madres primerizas, ahí todas hablaban de lo poco perfecto que era su día a día y fue inevitable sentirme aliviada.
Comprendí que no tenía que buscar hacer todo perfecto y eso no me hacía mala madre, sino un ser humano en una nueva etapa de su vida. Hoy mi hijo tiene 5 años y si han sido muchos errores, pero he aprendido inmensamente a ser tolerante, a quererme como mujer, a reconocer mis áreas de oportunidad y sobre todo a valorar cada esfuerzo de mi esposo.